El bambú es una planta que ha desempeñado un papel importante en el
desarrollo de determinadas culturas con las que ha convivido mutuamente.
Culturas como la asiática han empleado el bambú en áreas tan diversas como la
construcción, la alimentación e incluso en la confección de tela y papel.
El uso de bambú a lo largo de su historia ha sido diverso teniendo en cuenta todas sus variedades: alimentación, medicina, fabricación de tela, papel (a partir de la celulosa de la hoja), instrumentos musicales, como fuente de energía (biomasa).
Características principales
del bambú
El bambú es una planta gramínea, su tamaño varía desde 1 metro de
largo y medio centímetro de diámetro, hasta de 25 metros de longitud y 30 cm de
diámetro. Son plantas herbáceas o leñosas y crecen de manera natural en todos
los continentes excepto en Europa.
Algunas de sus variedades (existen más de 1.500) son conocidas por
ser las plantas de crecimiento más rápido, no obstante, su aprovechamiento debe
realizarse mediante una gestión responsable, que no provoque deforestación de
zonas de cultivo de este material.
Es un
material muy
flexible y ligero: elasticidad: 9.000-10.000 N/mm²; y
resistencia a rotura: 84-120 N/mm².
Su coste como materia prima es bajo, aunque requiere de mano de obra
especializada para su instalación y aplicación en la construcción de edificios.
Es un material rápidamente renovable ya que existen especies que
pueden alcanzar hasta 20 metros de longitud y 0,20 m de diámetro en menos de 9
semanas. La variedad más utilizada de bambú para la construcción de casas y
puentes es la guadua de la fustifolia y el girantocloa.
Se estima que se puede
construir una vivienda unifamiliar básica, con el bambú de la variedad guadua
recogido en una plantación de unos 100 m2 de superficie transcurridos cuatro
años.
Su uso es idóneo en climas cálidos y húmedos, ya que
construir con bambú permite que no se acumule el calor y también favorece la
ventilación natural. Por este motivo es un elemento estructural clave en
edificios construidos en zonas tropicales.
Es capaz de capturar cantidades de CO2 similares a la de los árboles,
cuando forma bosques (trópicos). Además producen más oxígeno que la mayor parte
de los árboles, puesto que procesa el dióxido de carbono de manera más
eficiente.
Requiere un consumo de agua mínimo para su crecimiento, y también
ayuda a la conservación de las fuentes de agua, ya que es capaz de extraer y
administrar el agua en función de su propia actividad biológica y del
comportamiento del suelo.
Es un material resistente y
ligero, que puede ser utilizado como recurso en la construcción de estructuras
sismo-resistentes, y en el diseño de elementos decorativos. Se considera qu es
el Acero Vegetal ya que es más resistente y duradero que algunas maderas como
el roble. Es un material que tiene gran resistencia a la tracción y a los
esfuerzos de torsión.
Aplicaciones del bambú en
los edificios
El uso de bambú a lo largo de su historia ha sido diverso teniendo en cuenta todas sus variedades: alimentación, medicina, fabricación de tela, papel (a partir de la celulosa de la hoja), instrumentos musicales, como fuente de energía (biomasa).
También en la construcción e incluso en la fabricación de muebles;
Por otro lado aplicado a la construcción de edificios puede ser utilizado como
un material ecológico y sostenible
Muy beneficioso desde el punto
de vista medioambiental, ya que se consume menos energía para su producción en
explotaciones sostenibles -entre otras ventajas ya enumeradas antes- y puede
ser una alternativa al ladrillo o el cemento.
EFECTOS NEGATIVOS
Al no ser
una planta nativa es muy difícil su transporte como también hallar un tipo de
suelo correcto para su desarrollo normal además de que si de verdad valdría la
pena la construcción con el bambú ya que el cambio de clima radical y el
transporte son muy costosos como para arriesgarse y hacer experimentos
